miércoles, 26 de agosto de 2015

Sueños



¡Qué padre es soñar!  Muchos escritores famosos han escrito sobre sueños. Que si la vida es sueño; que si soñar no cuesta nada; Nada nos pertenece en realidad mas que nuestros sueños (Nietzsche); Si es bueno vivir todavía es mejor soñar, y lo mejor de todo despertar (Machado); Un hombre que no se alimenta de sus sueños, envejece pronto (Shakespeare). 

Infinidad de sueños han corrido y corren por nuestras mentes. Muchos se han hecho realidad. ¿De qué depende que se realicen? Nos preguntamos constantemente. Dependen también de nuestra mente. Como pensamos, como sentimos, como compartimos, como reaccionamos ante cada situación. Nuestra poderosa mente puede cambiar las pesadillas en sueños placenteros.



Sueños rotos, sueños inconclusos, sueños que creemos nunca se volverán realidad. Nuestra mente trabaja a mil por hora y nos confundimos. Cuando estamos "despiertos" nos convencemos que no es posible realizar lo que soñamos y al hacerlo estamos cerrando las posibilidades de que se conviertan en la vida que queremos. En esta confusión mezclamos pasados y presentes e idealizamos futuros. Realmente qué es lo que tenemos, tenemos el presente solamente. Lo que estamos pensando/viviendo es lo que estamos convirtiendo en realidad de esos sueños.


Nuestros sueños son nuestra obra, sólo nuestra, cuantos colores quieras ponerle es tu decisión. La gama es infinita, así como de infinita es la imaginación.

Estamos dormidos y vivimos con los ojos cerrados, soñando todo el tiempo. Estamos inmersos en un sueño individual y dentro de ese sueño estamos realizando muchas cosas solos. Dirás pero si estoy rodeado de personas. Si, todas esas personas también están soñando su sueño, individualmente.  Cuando despertemos, nos volveremos conscientes de la realidad, es cuando realmente dejaremos de soñar y nos volveremos uno con todo lo que existe. Nos convertiremos en el Universo mismo.



Soñemos en amar, en servir, sueños de felicidad ante todo lo que se nos presente. Nuestros sueños son creación de nuestros anhelos de conocernos. Soñemos agradecidos por la oportunidad de deleitarnos de esta vida maravillosa que nos llena el sueño del cuerpo, de un mundo asombroso, de un Universo resplandeciente lleno de Amor.




1 comentario:

  1. Estoy triste aun por la muerte de mi querido Wayne Dyer. Sin el y sus Zonas Erroneas no hubiera podido superar muchos asuntos en mi juventud. Al igual que Dyer encuentro en tu blog mucho conocimiento y sabiduria y mucha optimismo! Muchas gracias por compartir tan hermosos pensamientos! En hora buena. Ana de la Cd. De Mexico.

    ResponderBorrar