¡Primero Yo!

Si, primero Yo. Yo soy el creador de mi mundo. Yo soy quien decide cómo quiero las cosas. Yo me amo. Yo me cuido. Yo soy un ser poderoso. Lo que Yo pienso se realiza.

¡Lo que pienso se realiza! y cuántas veces nos quedamos detrás. Pensamos en los demás antes que en nosotros. Olvidamos nuestros deseos y bienestar por los deseos y bienestar de todos los que nos rodean. Y luego tenemos miedo de que no nos quieran porque no hacemos lo que quieren.

Nos duele profundamente cuando nuestras expectativas no se cumplen. Hacemos planes y anticipadamente decidimos lo que queremos para el futuro. Error.

Lo único que realmente tenemos es el momento que estamos viviendo, ahora. Y si estamos sufriendo por lo que otras personas nos hacen, otro error, tenemos que comprender que esta es una experiencia más para aprender a no permitir que nuestra paz interior se vea dañada. Nuestra vida se verá afectada para bien ó para mal, pero no debemos dejar que ésto transforme nuestro ser.

Nuestro propósito en la vida es ser felices y ayudar a los demás. Servir, no ser serviles. Primero yo voy a ser feliz y si de pasadita te hago feliz, qué mejor.

Decidimos venir a aprender cosas inimaginables, a amar sobre todas las cosas y a que nos amen o no. A sentir muy dentro la dicha de la vida humana y la de la naturaleza. A agradecer cada minuto que pasa por todo lo que se nos ha otorgado.

Así que amemos y seamos felices.