domingo, 26 de julio de 2015

Cuando TODO cambia


Momentos inesperados, ó quizá esperados porque no estabamos satisfechos y deseabamos cambiar. Nuestros deseos son pensamientos y nuestros pensamientos se vuelven realidad.

Las relaciones humanas son las que nos afectan en forma drástica. Idealizamos a las personas, en nuestra mente creamos el panorama ideal, pero sólo está en nuestra mente. Por mucho que convivamos con esas personas nunca sabremos lo que en realidad pasa por su mente. Nos hacemos a la idea de que todo está bien cuando en realidad no es así. 

                      

Y así, de repente viene el cambio. Nuestros ideales caen por tierra y no hay nada que podamos hacer. Nuestra vida se ve afectada y todo, absolutamente todo, cambia y tenemos que empezar a construir una vida nueva.


Se requiere de mucho valor para tomar decisiones tan drásticas. Aquí es donde entra nuestro amor. No vamos a olvidar pero vamos a perdonar. Comprender que lo que esperabamos no es lo mismo a lo que las otras personas querían. 


Ver hacia adelante con optimismo, acomodar las cosas para que encajen en la nueva vida. Nunca perder el rumbo ni deprimirnos, todo lo contrario, sacar a relucir nuestra luz interior para que brille iluminando nuestro camino, nuestra luz es el amor del Creador.


                    

No es conformismo es aceptación ante las situaciones que se han presentado, situaciones que elegimos experimentar cuando llegamos a este mundo.




 Somos seres excepcionales, confiemos plenamente en que nuestros destinos están creados con amor. Nada puede cambiar lo que somos. Somos amor en forma humana, amor que todo lo puede. Amor que está destinado a reunirse con nuestro Creador.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario