Todo está en nuestra mente.

Nuestra mente vaga por lugares insospechados, generamos lugares ideales en donde nos gustaría estar, vivimos situaciones placenteras, amamos, odiamos, reñimos, sufrimos, nos reímos. Todo está en nuestra mente. 

Nos hablan de cielo y del infierno, del bien y del mal, todo está en nuestra mente. No hay un futuro, no hay un pasado, todo lo que estamos viviendo (tal como lo indican las palabras) es presente. Todo está en nuestra mente.

Vivimos en un mundo material creado por la conciencia colectiva, todos somos uno, vemos lo que "aparentemente otros" están proyectando y vemos reflejado en el mundo lo que estamos experimentando. Todos "los demás" también están viviendo lo que estamos proyectando. Todo está en nuestra mente.

                              

Nuestra mente es tan poderosa que transformamos nuestros pensamientos en materia. ¿Qué es real? ¿Qué es lo que queremos?

Como mencioné antes, nuestra mente es muy poderosa y con ese poder podemos transformar nuestra vida. Eliminemos de nuestra mente el infierno, lo malo, los rencores, las envidias, las críticas. Poco a poco empecemos a destapar y dejar brillar nuestro verdadero ser. Crearemos un paraíso en la tierra, veremos el amor reflejado en todos los seres, compartiremos nuestro espacio en armonía, felicidad y paz. Empecemos por cambiar nuestros pensamientos. Todo lo podemos. Todo está en nuestra mente.